La braquilogía es una figura que permite el empleo de una frase corta semejante a otra más extensa o compleja. En otras palabras, es una forma de elipsis que permite la eliminación de frases que se sobreentienden para reducir el párrafo.
El término braquilogía proviene del griego brachýs que significa breve y logía que significa discurso. Es una figura de tipo elíptica puesto que busca la sustitución de palabras que parecen difíciles por otras más simples y entendibles, empleando para ella la técnica de la eliminación.
El buen uso de la braquilogía se observa cuando las frases no pierden el sentido y es perfectamente comprensible por el lector, es decir, no se ve afectada. Sin embargo, se sugiere no excederse en su uso.
Ejemplos de braquilogía
- Me siento cansado > siento que estoy cansado.
- Que sea lo que Dios quiera > que sea lo que Dios quiera que sea.
- Me creo una persona de principios > creo que soy una persona de principios.
- Pensé morir cuando lo perdí > creí que me iba a morir cuando lo perdí.
- Es igual > de cualquier forma que lo hagas es igual.
- Quedó claro > me quedó claro que no quieres.
- Me frustra > de verdad me frustra tu actitud.
- Lo sé > sé que debo cumplir mis obligaciones si quiero salir a jugar.
- Soy sociable > me desenvuelvo muy bien cuando estoy rodeado de personas.
- Hoy no puedo > tengo cosas que hacer de gran importancia.
- Está bien > cuenta con ello, haré lo que me pides sin ningún problema.
- Quizás > es posible que podamos reunirnos mañana o cuando gustes.
- Creo que si > probablemente sucedió como lo estás contando.
- Estoy libre > tengo todo el tiempo necesario para hacer lo que me pides.
- Si está > se encuentra adentro ordenando un poco la casa.
- Salgamos > demos un paseo para distraernos un poco.
- Es una tormenta > se escuchan rayos y un estruendo espeluznante.
- Quiero café > voy a preparar café antes de retomar el trabajo.
- No quiero > no me gusta que me estés dando órdenes a cada momento.
- Vete > no eres bien recibido en esta casa.