En retórica, la concesión es un recurso literario que tiene como fin fingir que se apoya por un corto período de tiempo una premisa contrapuesta a la que verdaderamente se quiere apoyar. Su punto de focalización es aportar más credibilidad a los postulados presentados.
La concesión presenta un razonamiento oculto. En otras palabras es emplear una oración que para ser entendida, se debe enmarcar. Ya que, su significado real es contrario al que puede notarse en una primera instancia.
En la poesía, suele emplearse para generar más fuerza a los postulados y con ello, hacerlos más creíbles. La concesión se apoya de la ironía y la picardía para que las frases tengan un mayor significado y los receptores la entiendan.
El término concesión proviene del latín “consentio” cuyo significado es acto y resultado de otorgar espacio al que posee mayor poder.
Ejemplos de concesión
- Yo declaro que Dios ha obrado en mi vida de tal manera que siento su bondad en mi alma y siento correr por mis venas su infinita misericordia.
- Sé que me lo has dicho antes, estoy clara con eso, pero él es tan varonil, tan fuerte, tan caballero, tan superior, no es capaz de mostrar un poco de su alma o sus sentimientos… es frío como un cubo de hielo, pero es el amor de mi vida.