La personificación consiste en atribuirle a los objetos inanimados características y cualidades propias del ser humano.
Ejemplo:
- El cielo lloró de verla tan feliz.
- Los pétalos le besaron largamente.
Por otra parte, esta figura literaria es utilizada, principalmente en aquella que va dirigida a los más pequeños. Ya que, es en los niños donde se fomenta la imaginación, el razonamiento y la comprensión del mundo que los rodea, por medio de las fábulas o leyendas.
Ejemplo:
- Caperucita roja.
- El ciervo que se miraba en el agua.
- La bella y la bestia.
Función de la personificación
La personificación o prosopopeya como se le conoce en otros apartados, tiene como función una intención didáctica y moralizante. Debido a que los personajes a quienes se les atribuyen las cualidades propias de los seres humanos, vienen a llevar a cabo acciones dentro de los principios y valores en lo físico y psicológico.
Dichas acciones, representan en esencia manifestaciones propias de las personas que actúan dentro o fuera de una norma. Esto se debe, a que los seres personificados pueden representar el bien o el mal y sus consecuencias dentro del contexto donde se ubican.
Partiendo de esta premisa, el lector interpretará y reflexionará acerca de las situaciones que de alguna manera dejarán en él una enseñanza. Esta a su vez, le permite clarificar cuándo su proceder está enmarcado dentro de lo que es correcto o incorrecto.
Ejemplo:
En el cuento universalmente conocido como Caperucita Roja, el lobo personifica, a ese ser calculador que pretende alcanzar su propósito engañando y causando el mal a otro. Por ello, quien lo lee termina aborreciéndolo y juzgando sus acciones.
¿Dónde encontramos la personificación?
Como todo recurso literario, la personificación la podemos encontrar en los diferentes géneros narrativos y artísticos. Tales como la música y la poesía. Además, de su ya marcada existencia en la narrativa.
En la música
Encontramos la personificación cuando el compositor introduce elementos humanizados para comparar a una persona a la que está dirigida el tema musical.
Ejemplo:
La canción Vivo por ella en donde el intérprete expresa lo siguiente, refiriéndose a la música
“En mi piano a veces triste la muerte no existe si ella está aquí”.
Sin embargo, quien escucha esta canción puede inferir que se trata de una persona.
En la poesía
Grandes poetas como Andrés Eloy Blanco han personificado atributos y cualidades de las personas en elementos de la naturaleza.
Ejemplo:
- “El sol enamorado la circunscribe”. (Andrés bello, Silva a la Agricultura de la Zona Tórrida).
Ejemplos de personificación
- Los visitantes disfrutaban y el sol sonreía.
- La luna lo miraba enamorada.
- El cielo se entristece y llora su larga ausencia.
- La mar embravecida rugía de furia.
- La selva le habla al mundo de su imponente belleza.
- El sol era su hermano y lo animaba a continuar.
- La muerte llegó a su lecho y le tendió la mano.
- El camino lo sedujo y le llevó consigo.
- Las estrellas le contaron lo que ella desconocía.
- El auto se lamentaba por tan cruel trato.
- La luna se reía de verlo tan feliz.
- El niño reía mientras el viento le cantaba.
- El río molesto reclamaba sus derechos.
- La luna se sentó a observar lo que pasaba en el bosque.
- El oso y el zorro se reunían en las tardes para oír las conversaciones de los árboles.
- El corazón piensa que la razón no existe.
- La pelota sentía cosquillas cada vez que rebotaba en el suelo.
- El toro enamoró a la vaca con poemas que le daba la sabana.
- La puerta con desprecio se cerró a sus enemigos.
- La cámara guardó grandes recuerdos en su memoria.
- El viento ha anunciado la llegada de la tormenta.
- El mar embravecido azota las rocas para mitigar su enojo.
- El cementerio recibe con sus brazos abiertos a todos sus huéspedes.
- ¡Vete! – decía el oso al joven cazador que no paraba de acecharlo.
- Aquella tetera pasada largar horas abrazando el agua para conservar su calor.
- La casa sonriente les daba la bienvenida a sus nuevos inquilinos.
- Aquel espejo no perdía la oportunidad de burlarse del reflejo.
- Cada noche la luna hablaba con las estrellas hasta quedarse dormida.
- La vieja gata pasó sus mejores años, tejiendo abrigos para sus pequeños hijos.
- Aquel rascacielos se ha enamorado de las caricias del viento.