El Emperador de Roma Publio Elio Adriano fue el que marcó el fin de la expansión del Imperio romano gracias a la renuncia de nuevas conquistas, además fue uno de los más cultos y promotor de casi todas las artes.
¿Cuándo y dónde nació?
Publio Elio Adriano nació en el 24 de enero del año 76 d.C. en Roma, pero desde pequeño vivió en Itálica, cerca de Sevilla, una de las ciudades romanas de mayor importancia que se puede encontrar en España.
Adriano. Edición por Escueladeletras.com. Original por Jl FilpoC a través de Wikimedia Commons.
Procedente de una familia de la Bética, quedó huérfano a los ocho años luego de la muerte de su padre en el año 85 d.C. Adriano fue adoptado por el emperador Trajano, que era su pariente, y Publio Acilio Atiano, y recibió una esmerada educación bajo su protección.
“El pequeño griego”
Trajano decidió enviar a Adriano a Roma para completar su educación, y estando allí desarrolló una gran afición por el idioma, la cultura y literatura griega, tanto así que se referían a él como “Graeculus” que significa “el pequeño griego”.
Además, se interesó también por las artes, tales como la música, la escultura, la arquitectura, la poesía y la pintura, las cuales ejerció. A pesar de no ser muy amigo de los libros, estudió filología y matemáticas.
A los 14 años regresó a Itálica por un breve período, y en menos de un año volvió a Roma por pedido expreso de Trajano.
El ascenso al poder
Trajano fue nombrado cónsul en el 91, año en el cual Adriano comenzaría a seguir la carrera tradicional de un Senador Romano.
En el 94 se desempeñó como miembro de un tribunal que dirigía casos civiles, en el 95 inició su servicio militar y a principio del 98, luego del fallecimiento de Nerva, se dirigió a Colonia para anunciar el ascenso de Trajano al trono.
Debido a que la relación entre Adriano y Trajano no fue la mejor, Adriano logró entablar una buena amistad con el emperador gracias a Lucio Licinio Sura, la mayor figura política detrás de Trajano.
Además, Adriano contaba con el favor de la esposa de Trajano, Pompeya Plotina, a instancias de la cual contrajo matrimonio con una sobrina-nieta del emperador Vibia Sabina, en el año 100 d.C. a pesar de ser abiertamente homosexual, razón por la cual no dejaron descendencia.
En el año 101 fue nombrado cuestor, y en el 102 sirvió como acompañante de Trajano en su primera guerra como emperador.
En el año 105 d.C. luego del estallido de la segunda guerra Dacia, volvió con el emperador como cabecilla de una legión.
Finalizado el conflicto, en el año 107 fue nombrado gobernador de Panonia Inferior por un breve período para luego ser electo cónsul en el 108, alcanzando así el pináculo de la carrera de Senador.
La carrera de Adriano se detuvo por unos 10 años, a excepción del año 112 d.C. cuando fue nombrado arconte honorífico luego de haberse trasladado a Grecia.
La consolidación en el trono
En el año 117, luego de que Trajano emprendiera su viaje de expedición hacia el oeste, Adriano quedó a cargo del ejército de Siria.
Trajano, gravemente enfermo, salió hacia Roma donde Adriano estaba al frente de los territorios orientales. Sin embargo, el emperador no pudo llegar y murió en una ciudad de Asia Menor.
Luego de la muerte de Trajano, Adriano ascendió al trono bajo extrañas circunstancias, ya que aunque era el sucesor natural del emperador, nunca fue nombrado como tal, y se puso en duda la autenticidad del testamento a favor de Adriano, ya que se creyó que era parte de la conspiración de la emperatriz Plotina.
Sin embargo, como Adriano tenía el mando sobre la mayor parte del ejército, fue reconocido como emperador gracias a la aprobación senatorial y al apoyo de los soldados sirios.
Políticas como Emperador
Adriano es considerado como uno de los cinco emperadores buenos y su importancia en la historia de Roma fue muy grande.
Políticas militares
Su reinado se caracterizó por ser un período de paz, ya que hubo una marcada ausencia de operaciones militares importantes.
Adriano abandonó la conquista de Mesopotamia iniciada por Trajano, firmó un tratado de paz con los Partos y pacificó las provincias orientales.
Políticas económicas
Debido a que Adriano tuvo un frío recibimiento en Roma, por causa de la ejecución de cuatro senadores acusados de traición lo que infundió temor a la población y censura por parte del Senado, hizo todo lo posible por tranquilizar la situación.
Perdonó todas las deudas de los ciudadanos del Estado, incrementó una especie de ayuda a la infancia y firmó un decreto donde establecía que la fortuna de las personas ejecutadas, recaería en la Hacienda Pública en vez de pasar a engrosar la fortuna del emperador.
Políticas culturales
Adriano fue un gran admirador de la cultura, razón por la cual favoreció la eclosión de nuevas formas artísticas a lo largo del Imperio.
Desde antes de acceder al trono, Adriano había mostrado interés en la arquitectura por lo que promovió grandes construcciones. La Villa Adriana de Tibur, hoy Tívoli, es uno de los monumentos más prominentes de su reinado, siendo considerado un referente de la historia del arte y la arquitectura.
Otra de sus contribuciones a la cultura que se puede destacar es la inclusión de la barba en la sociedad romana, como parte de su influencia helenística.
Últimos años
En el año 138, Adriano adoptó a Antonino, un senador maduro y estimado, para la sucesión del trono, con la condición de que adoptara a Lucio Ceionio Cómodo y a Marco Annio Vero. Éste último seria el emperador Marco Aurelio.
Durante sus últimos años de vida presentó una mala salud, se cree que sufría de cardiopatía isquémica basado en un estudio realizado a las estatuas construidas a finales de su reinado. Intentó acabar con su vida para ponerle fin al sufrimiento causado por su condición, pero en varias ocasiones sus sirvientes se lo impidieron.
Adriano falleció el 10 de julio de 138 en su villa en Baiae, un poblado costero del Golfo de Nápoles, a los 62 años luego de haber padecido de una dilatada enfermedad.